Uno : No planificar.
Si decidís casaros, hay una palabra clave que hay que tener en mente desde el primer día: “planificación”. Como cualquier otra cosa, una boda también implica y necesita de una etapa planificadora. Muchos son los elementos que hay que poner en armonía, coordinar y equilibrar para que el resultado sea el que queréis.
Imagen de Stephane 62008
Dos : No contar con el respaldo de un sitio web.Los sitios web de bodas son herramientas clave para los novios a la hora de organizar su boda. No sólo porque reúnen en un mismo espacio virtual todos los elementos, proveedores e información necesaria, sino también porque ofrecen herramientas para ayudar a los novios a organizar la boda.
Tres: No elaborar un presupuesto global y estimativo de lo que queréis pagar por vuestra boda.
Este error viene de la mano del anterior, el de la no planificación: un error muy común es no armar desde el principio un presupuesto estimativo de lo que estáis dispuestos a pagar por la boda. Que la famosa frase “es una vez en la vida” no os deje en banca rota.
Cuatro: No preparar una lista de prioridades.
La idea es priorizar dónde va el dinero que estáis dispuestos a gastar en la fiesta. Por ejemplo, si preferís destinar más a las bebidas porque para vosotros la barra libre es lo más importantes, tendréis que bajar las pretensiones con respecto a otro gasto. Es decidir si os va más en el menú, en la música o en los detalles... resignar por un lado y no resignar por el otro, es un tira y afloja, pero creemos que es una de las mejores maneras de optimizar el presupuesto.
Cinco: Querer tener todo organizado y los proveedores contratados con mucha anticipación.
No podemos pasar toda la organización de la boda queriendo cerrar las cosas lo antes posible. No podemos organizar la boda a la par que elegimos el color de las cortinas del salón, los azulejos del baño, visitamos tiendas para comprar los muebles del estudio, vamos probando caterings de sábado a sábado, acompañamos a media familia a comprar trajes y una docena más de tareas... Compatibilizar todo ello traerá graves consecuencias para la organización del evento.
Imagen de www.spaweekblog.com
Seis: Discutir por todo.Estamos nerviosos, ansiosos, quedan muchas cosas por hacer ¡Las emociones están a flor de piel! Y un resultado se vuelve inevitable en este escenario: ¡discutir por cada mínimo detalle! Por eso, es bueno que controlemos algunas emociones y la ira del momento. Recomendamos tomar un descanso durante la organización de la fiesta y pensar en el momento increíble que viviréis. Y sobre todo, acordaos de encargar a alguien que se encargue de todo para que vosotros podáis disfrutar de ese día.
Siete: Estrés, el peor enemigo de los novios.
¿Cómo organizar una boda y no estresarse? ¡Imposible! Estar 100% despreocupados y relajados siendo novios es una utopía que se vuelve contradicción: no se puede ser novio/a y estar relajado/a al mismo tiempo porque estar estresados es parte de la esencia de toda novia. Lo que sí podemos es reducir el estrésalm mínimo. ¿Cómo? Con los servicios de una wedding planner ( una organizadora de bodas). Nosotros nos encargaremos de todo,de pedir presupuestos, cotejarlos, ver sitios, elegir músicos, proponeros menús originales y a vuestra medida, buscar los detalles, el coche que os llevará a la ceremonia, organizar a vuestros invitados, acompañaros a elegir la ropa, cerrar todos los cabos con los proveedores y hasta de oficiar vuestra ceremonia. Así, vuestro tiempo quedará libre para las otras tareas a las que realmente queréis dedicaros. Estaremos en contacto cada día, para que lo reviséis todo. Todo se hará como vosotros decidáis.
Imagen de dulcecolor.wordpress.com
Tuneado de casamientosonline.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nos encanta recibir comentarios. Los leemos todos!